Los beneficiarios de las cajas del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP) se quedaron esperando los perniles que les ofreció el gobierno de Nicolás Maduro, pero nunca llegó.
Imposibles de costearlos debido a que un kilo de pernil cuesta el 70% de un mes de trabajo Bs. S 3400, de las 20 mil toneladas que prometieron solo les quedó a sus adeptos el sofocón de la espera.
Al respecto, Rosiris Hernández, jefa del CLAP de una zona popular en el este de Caracas, aseguró que en su comunidad fueron asignados 136 perniles de 4 kilos, los cuales servían para abastecer a 424 familias pero nunca llegaron.
Asimismo, detalló que son amenazas por los beneficiarios de los sectores, quienes les exigen el pernil.
“No tengo ni para darle kilo y medio a cada hogar. Ni dividiendo ni bajando el dibujito del pernil por Internet podré atenderlos a todos. Las jefas de calles me han llamado porque las están amenazando. Un muchacho que es malandro le dijo a una que le pegaría un tiro si no le entregaba el pernil completo”, así lo manifestó Hernández a El Nacional.
Con subsidios insostenibles, Maduro pretendía comerciar la proteína por 250 bolívares, según señaló la coordinadora del CLAP.
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